1. Tamaño de la porción
Revisa cuántas porciones hay en el envase y el tamaño de una porción. Todos los datos en la etiqueta están basados en ese tamaño. Si consumes más, también aumentan calorías y nutrientes.
2. Calorías
Indica cuánta energía aporta una porción. Si estás buscando bajar de peso o mantenerlo, este dato es clave.
3. Grasas totales, saturadas y trans
Las grasas saturadas y trans están asociadas con enfermedades cardiovasculares. Lo ideal es que su consumo sea lo más bajo posible.
4. Sodio
Un exceso de sodio puede aumentar la presión arterial. Elige productos con bajo contenido de sodio (menos de 140 mg por porción es ideal).
5. Azúcares añadidos
Evita productos con altos niveles de azúcar añadida. Busca opciones naturales o sin azúcar añadida.
6. Fibra y proteína
La fibra ayuda a la digestión y la proteína te ayuda a mantener músculo. Entre más alto sea el contenido de estos, mejor.
7. Ingredientes
Están listados en orden de cantidad. Si el primer ingrediente es azúcar, grasa o sal, probablemente no sea la mejor opción.